jueves, 13 de enero de 2011

Lágrimas que discurren por mi mejilla sin apenas pensar en nada. Lágrimas de sentimientos que empiezan a salir de este músculo que late cada día. Pensamientos, que deberían estar en el corazón y no todo el día en la cabeza. Carpe Diem que debería ser mi filosofía de cada día...
Las sábanas y mantas me agobian,pero la luz no me deja hacer otra cosa que escribir así. Es la una y media, pero mis ojos no se cierran, mi cabeza no deja de pensar, y mi corazón...late con más fuerza. El móvil no suena,esta durmiendo,pero mis pensamientos no. En esta fría noche parece que nada esta tranquilo. Todo esta revuelto, todo esta despierto.
La casa está tranquila interrumpida por el ruido de las teclas del portátil, porque obviamente el papel y el boli han sido abandonados. Parece que viene alguien, pero se alejan esos fuertes pasos.
No dejo de pensar, no dejo de dar vueltas, no puedo dormir, o..¿es mi corazón el que no puede?Es difícil explicar dicha situación, todo me afecta,todo excepto nada.
La foto, puede que para mí sea la foto más bonita del mundo..todo es simple, sencillo y sobre todo fácil. Fácil, bonita palabra, la usamos poco,porque tendemos a usar su contrario diariamente. Difícil, es lo único que podemos usar para definir nuestra vida, aunque la dicha no es así, si no que somos nosotros quienes la hacemos así. Volviendo a la foto...un último beso, un último abrazo y un último adiós. Vive la vida cada minuto y encontrarás un motivo por el que quedarte en ella...y sobre todo vive el día a día como si fuera el último. No te calles un te quiero, ni un gracias, ni un eres tonto, ni un necesito hablar, ni un nada..eso es, simplemente, sencillo, no pienses, acelera tu corazón al máximo y enfréntate a las cosas, no las dejas para mañana, porque no sabes lo que pasará al día siguiente. Es sencillo simplemente habla con el corazón y deja la mente tranquila, ya ha tenido suficiente.
Vive, sólo eso, aprovechando cada minuto y dí todo lo que tienes dentro, da igual el tiempo, es caprichoso y pasa rápido, al igual que los latidos de tu corazón. HABLA SIN MIEDO.

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